Aquí les dejo un artículo de Yarexis Martinez, gran amiga, que me permitió poner por aqui a la consideración de ustedes:
Últimamente he escuchado frases como: "Dios no me escucha", "Dios es malo", "Dios no me hizo tal milagro o aquél otro" o "Dios se ha olvidado de mí"; y pretendemos además darle órdenes a Dios; "tal trabajo" "a tal hora" "en tal momento" y hasta sobornos le hacemos "si tú me ayudas con mi suegra, te prometo que el mes que viene me caso con su hija", "Si me ayudas a conseguir trabajo te prometo que empiezo a ir a misa los domingos", "Si me ayudas a que mi hija se porte bien, te llevo un mes seguido rosas para adornar tu santuario" y en fin , un sin número de promesas, y un sin número de pedidos, encomiendas o milagritos que se le piden a Dios pero El siempre termina pagando los platos rotos. ¿Por qué? porque si hace el milagro la gente no cumple sus promesas y si no lo hace porque simplemente no es el tiempo, ni la hora, ni tienes fe de que lo realizará entonces El es el malo de la película...
En ambos casos sale siempre perdiendo Dios; si es bueno es porque es bueno, si hace el milagro es porque lo hace chueco. “Sí, yo sé que lo prometí pero este domingo me voy a la playa con mi novi@, el próximo si voy”; “Este mes no tenía dinero para las flores, te las llevo el mes que viene”; “Mi hija se sigue portando mal, no me has hecho el milagro como quería....” Y simplemente nadie se pone a pensar que Dios, que es rico en amor y misericordia y que siempre ha estado y estará dispuesto ayudar a sus hijos, no ese al que tanto le pedimos.
¿¿¿¡¡¡¡¡¡NO ES UN ALCAHUETA!!!!?????
Si un "alcahueta" el rostro que muchos tienen de Dios es el de alcahueta; el que responde a promesas que ni entre humanos nos cumplimos (y ya de antemano sabemos que no la cumplirán), el que responde a nuestras urgencias y exigencias; el que nos perdona el mes anterior y este mes el mismo pecado, el que nos da la salud pero a las semanas estamos de rumba otra vez, el que nos salva con bien de un robo pero a los dos días llegamos a las 2am a la casa, el que nos ayudó a encontrar el trabajo y lo pierdes por incumplir con el horario, el uniforme o por llevarte algo ajeno; el que te ayuda con tú hij@ cuando te envía a un herman@ a darte un consejo y le dices: "no es tú hij@, es mí@" o cuando tienes problemas en tú casa y todo el mundo tiene la culpa menos tú?
Ese es el rostro de Dios que muchos tienen de él; es
te es el rostro que quisieran siempre ver actuar.
¿¡ Nunca se han detenido a pensar
que Dios te ayuda porque quiere un cambio de vida de tú parte?!
No te pide que: "no tomes"; sino que no te gastes toda la quincena en el alcohol.
No te pide que: "no le des libertad a tu hij@" te pide que l@ corrijas a tiempo
No te pide que: "no te angusties por el problema o dificultad que atraviesas" sólo te pide que lo dejes actuar.
No te pide que: "te la pases en la iglesia todos los días, ni reces a cada momento, ni te des golpes de pecho" sólo te pide que te acuerdes de él al menos una hora a la semana, o le agradezcas al menos que despertaste nuevamente, que tienes salud, que tienes trabajo, o simplemente le agradezcas el hecho de estar vivo.
Dios dijo "ayúdate que yo te ayudaré"; y requiere un cambio de vida de tú parte y que no lo agobies con tus asuntos o lista de pedidos.
Dios dijo "misericordia quiero y no sacrificios" no quiere flores, no quiere promesas que no cumplirás, no quiere grandes ofrendas ni que le pagues promesas; quiere un cambio de vida de tú parte y que sea parte de esa ofrenda el amor a tú prójimo y a él por encima de todas las cosas.
