Al fin pasó...
Ya me estaba acostumbrando a esta hermosa familia, los Madera ( Qué ironía ¿ no?) cuando pasó lo de siempre. La Señorita me había llevado a dónde sus antiguos patrones para que me conocieran y de repente me encontré sólo en medio de la ciudad, otra vez abandonado...
-¡ Mario se me perdió el tipo!
- ¿Cómo? Y ¿ Dónde lo dejaste?
- Nos estábamos montando en el Metro y él se me quedó atrás. Sabes que es burda e´ lo quedáo. - ¡ Por lo mismo no podías dejarlo sólo! Y muchísimo menos en el Metro!!!!
¿ ¿ En qué estación?? Salgo a buscarlo. ¡ Vente!!
- No te pongas así. No es nada nuestro.
- ¡ Entonces voy sólo!! Coñ... Siempre me sales con las mismas pendejadas...
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